Existen tantas profesiones como formas de ejercerlas, pero sabemos sobre esto que un título o un papel no significa necesariamente que seamos profesionales, sí en escrito pero en la práctica, eso es otra cosa que no se logra de la noche a la mañana sino con dedicación, esfuerzo y con determinación de no simplemente hacer las cosas que nuestra profesión nos exige, sino el hacerlas bien y con la intrepidez de lograrlas con excelencia.
Cómo reconocer a un buen locutor de radio profesional
- Un buen locutor tiene una buena dicción
Bueno quizá más que decir “tiene”, podríamos ser más certeros y decir: desarrolla. Porque no es algo fácil acentuar, pronunciar y decir las palabras, porque aunque sea algo que hacemos a diario difícilmente ponemos atención a cómo hablamos y si lo hacemos correctamente.
Imagina que en la radio pronuncias una palabra y se escucha esta como una grosería, seguro terminas trasmitiendo una disculpa al aire, por eso un buen locutor habla de temas de interés y noticas, pero además cuando lo hace, todos podemos entenderlo.
- Un buen locutor sabe leer
¡A cómo está eso!, si hizo una carrera sabe leer ¡qué no!, pero ser un buen lector es muy diferente a simplemente saber leer, porque la dicción, entonación y correcto respeto de los signos de puntuación hacen al buen lector.
Para leer una noticia, un comunicado o un anuncio es preciso ser un buen lector, y además, como el buen cantante, cuando alguien nos lee de forma grata y con buena dicción, terminamos amando no solo lo que nos dice sino el cómo lo hace pues nos crea toda una atmósfera lectora que hoy es poco común.
- Un buen locutor sabe darle sabor a su voz
Sí, así como la sal y la pimienta dan sabor a un guiso, en la cabina de radio un locutor debe ponerle sabor a su trabajo en la locución, darle un estilo propio. En algunos programas la voz del locutor se oye lenta, monótona, casi lo sintonizamos porque andamos mal de insomnio y queremos dormir.
La anterior fue una broma pero sí, lo ideal es que el locutor dé matices, tonos, ritmos e interés a lo que nos dice en cabina para así sentir que quien nos acompaña con su voz es una presencia amena y entretenida, porque no olvidemos que estamos comunicando a otros.
- Un buen locutor aprende todos los días de su oficio
Lo genial de la locución de radio es que no hay nada escrito con tinta imposible de borrar, y que con la práctica y el oficio, este profesional puede aprender día a día en cabina para saber que está haciendo mejor su programa, que lo hace un poco débil y sobre todo, cómo ser un mejor locutor de radio profesional.
El oficio es hermoso porque con la voz logramos trasmitir no solamente noticias, acontecimientos o dar compañía, sino que nos permite cada día ir creciendo y moldeando nuestro conocimiento a los valores que mañana, harán nuestra grandeza en la locución.